Hay un protagonista único,
absoluto, que ha puesto de acuerdo a toda la prensa mundial. La muerte de Nelson
Mandela es una noticia de máximo alcance global, para la que, por ejemplo, la
agencia Associated Press ha enviado a los medios sus ‘alertas flash’, las
cuales utiliza en extrañísimas ocasiones, sólo en sucesos de excepción, como la
elección de un papa, la llegada del hombre a la luna o los atentados
terroristas de las Torres Gemelas.
Hoy toda la prensa mundial dedica
su portada a Madiba, al que muchos periódicos coinciden en destacar como un
héroe, como el hombre que liberó a Sudáfrica. Algunas de esas páginas, como New
Yorker, forman ya parte de la historia.
Ayer, a los pocos minutos de
trascender la noticia de la muerte de Mandela, The New Yorker publicó a través
de Twitter la que iba a ser la portada de su nuevo número, con una genial
ilustración del líder sudafricano firmada por el dibujante Kadir Nelson, autor
también de un libro con más de estos dibujos sobre Mandela. Mucha gente se
sorprendió de la rapidez de New Yorker, hubo incluso quien lo criticó. Lo que
queda fuera de toda duda es el enorme éxito en las redes sociales de esta
portada, que se adelantó al resto y que no tardó en correr como la pólvora.
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